Los buitres de la SGAE, aparte de perseguir a aquellos usuarios que se descargan música de Internet, persiguen a ferias, bautizos, colegios, juguetes, piscinas y pequeños comercios que reproducen música sin pagarles a ellos los derechos de autor.
Exigen cantidades mensuales a pequeños comercios por tan solo poner la radio en la tienda a modo de hilo musical.
Decenas de actividades están gravadas por los derechos de autor en España. Prácticamente, cada lugar o momento en el que suena una canción o se visualiza una obra audiovisual supone un acto de propiedad intelectual y, por tanto, es susceptible de generar ingresos a las entidades de gestión que se encargan de su protección, tanto económica como legal.
De este modo, cualquier local o comercio de España es susceptible de sufrir la visita imprevista de un agente auditor de la SGAE u otras entidades de autor para solicitar su correspondiente cuota. Es el caso de una pequeña tienda de ropa situada en Madrid, cuya dueña recibió hace escasas fechas la visita de la SGAE. La entidad reclamó a la dueña la contratación de una licencia para poder encender la radio en su establecimiento (ver documento adjunto). Lee el resto de esta entrada »